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El pleno orgánico del Ayuntamiento de Carmona ha aprobado por unanimidad la disminución del sueldo de los concejales y una importante reducción del número de cargos de confianza que supondrán un ahorro anual de 180.000 euros para las arcas municipales.
En concreto, el sueldo de los concejales se ha reducido en algunos casos hasta un 15% respecto a la anterior legislatura. Por su parte el alcalde, Juan Ávila, no cobrará sueldo del Ayuntamiento sino que percibirá una retribución mensual de la Diputación Provincial que económicamente es equivalente a la de un concejal. Se ha reducido también el importe por asistencia a plenos y a comisiones informativas para concejales sin delegación municipal y sin dedicación exclusiva; una cantidad que no será fija como en años anteriores sino que variará según la asistencia a estas sesiones y que en ningún caso podrá superar los 400 euros mensuales.
En cuanto a las liberaciones, tanto el gobierno municipal como la oposición tendrán el mismo número de concejales con dedicación exclusiva, un total de siete, que en el caso de la oposición serán cuatro para IU y tres para el PSOE. Por su parte, el concejal de Unidad por Carmona no estará liberado pero contará con una secretaría de grupo, al igual que el grupo municipal popular.
El pleno ha aprobado también una reducción del número de cargos de confianza. Se han eliminado los anteriores cuatro directores de área (Urbanismo, Servicios Sociales, Deportes y Recursos Humanos) para pasar a un solo director (Recursos Humanos y Hacienda), cargo que será ocupado además por una funcionaria municipal por lo que su sueldo no supondrá una carga económica extra para el Ayuntamiento.
Por último, los grupos municipales de IU y PSOE han utilizado la mayoría que disponen en el pleno para aprobar una enmienda conjunta que les permitirá ser los representantes del Ayuntamiento tanto en el Consorcio del Huesna como en la Mancomunidad de Los Alcores. El gobierno municipal, cuya propuesta fue rechazada por la oposición, ha mostrado su contrariedad por este hecho ya que resulta incomprensible que ni el alcalde ni los concejales del equipo de gobierno estén fuera de estos órganos supramunicipales, más aún cuando existía la posibilidad real de que el alcalde de Carmona fuese el presidente de la Mancomunidad.