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Las obras de consolidación del Albollón han permitido abrir un nuevo mirador hacia el paraje natural de la Cueva de la Batida la vega y la campiña sevillana.
Carmona cuenta desde hace unos días con un mirador turístico y medioambiental gracias a las obras desarrolladas por el Ayuntamiento de la localidad para la consolidación del escarpe del Albollón y de las mejoras realizadas en la calle Hermana Concepción Orellana.
La citada actuación, cofinanciada por la Unión Europea a través de los fondos de desarrollo regional FEDER, no sólo ha recuperado la estabilidad de una zona afectada gravemente por corrimientos y desplazamientos de tierra, sino que ha permitido que los carmonenses y las personas que visiten la ciudad puedan contemplar desde un emplazamiento privilegiado la campiña sevillana y el paraje natural de la Cueva de la Batida.
Junto al nuevo mirador y a la consolidación del Albollón, la finalización de estas obras ha logrado también la recuperación de la movilidad en esta zona del conjunto histórico de Carmona con la apertura al tráfico de la calle Hermana Concepción Orellana, que ha permanecido cerrada al tráfico durante los últimos años.
El alcalde de Carmona, Juan Ávila, ha mostrado nuevamente su satisfacción “por la finalización de estas obras, desarrolladas en los últimos meses y que han sido posible gracias al esfuerzo de este Ayuntamiento y a las gestiones realizadas al más alto nivel ante el gobierno central y las autoridades europeas por la amenaza que existía de perder la cofinanciación de los fondos FEDER”.
El objetivo fundamental de esta obra ha sido el de frenar el deterioro del escarpe y consolidar esta zona urbana que corría un grave peligro de desprendimiento de terreno por su inestabilidad geológica. De hecho, el escarpe ya sufrió en noviembre de 2010 un derrumbamiento que arrastró a varios vehículos particulares y obligó a limitar el tráfico rodado por la zona.
